Terrorismo de Estado y estado de terror

Waldo Oblitas F.

Parecería que estas palabras tienen los mismos conceptos; aunque con ligeras variaciones en la interpretación, estas formas de administrar un Estado conducen nomás a las nefastas dictaduras.
Precisamente la actitud del Gobierno de turno es prepotente e ilegal, utilizando presiones sociales que, se denunció, son muy bien remuneradas. Tales movimientos de masas no fueron vistos ni siquiera en la nefasta época del MNR en el poder y de los gobiernos de fuerza, hoy se están reeditando con mayor impacto, aunque el presidente Morales había jurado ser demócrata cuando sea administrador del Estado (porque las dictaduras lo habían perseguido). Ahora se está utilizando metodologías que son producto del inicuo y nefasto asesoramiento de enemigos de la Patria, a quienes los escucha sin retaceo alguno. Nos preguntamos si estos serviles abogados y “profesionales de la anti-democracia” podrán devolver la vida a los más de 50 muertos ocurridos en esta administración, que se los podía evitar, que son producto del envío de hordas fundamentalistas afines al Gobierno, que sólo han conseguido ahondar la división del país y la puesta en marcha de la destrucción de la integridad de la Patria.
La declaración del Presidente, seguramente sin pensar en las consecuencias, de que se puede nomás pisar la ley y sus “abogados” podrán legalizar lo ilegal, nos recuerda a monarcas del “medio-evo” que sostenían sin rubor aquel apotegma latino REX ET LEX, es decir que el rey era la ley y por ello era dueños de vidas y haciendas. Con este principio autoritario, apoyado por los movimientos raciales (o sociales), hoy observados azorados cómo se utiliza grupos irregulares, que sin ninguna orden judicial de autoridad competente se secuestra y encarcela a ciudadanos, sin el debido proceso ni el derecho a la defensa en juicio, proclamado por los propios derechos humanos y el Pacto de San José de Costa Rica, de los cuales somos signatarios.
Este accionar prepotente del Gobierno de turno nos está mostrando que ya asume una actitud de facto, a la que precisamente los movimientos “sociales” y el Presidente combatieron, pero ahora olvidan a aquellos regímenes totalitarios y aplican aquellas actitudes nazi-fascistas con mayor vehemencia. Siembran terror en el pueblo, tal cual lo hacía el famoso Atila, que decía que donde su caballo pisaba, no crecía más el pasto, o como el Monarca Luis XV que expresaba “EL ESTADO SOY YO”.
Ante esta actitud antidemocrática del Presidente y antes de que se produzca a corto plazo una guerra civil sin precedentes, al menos aquellos que votaron por el Sr. Morales, y gracias a ello y al fraude sistemático hoy es el Presidente de la República, le exigen que de una vez por todas respete la Constitución y la ley, que juró cumplirlas. Que in actum se reconstituya el Tribunal Constitucional y las instituciones públicas, escogiendo a los mejores profesionales en la materia, para que con alto valor moral y patriótico rescaten el estado de derecho.
De no hacerlo cuando todavía la sangre no ha llegado al río, pronto tendremos una Bolivia balcanizada, que es lo que más desean algunos de nuestros vecinos, especialmente Chile, que aplauden este desmembramiento de la Patria, para facilitar su expansión territorial y adueñarse nuevamente de nuestra riqueza, esta vez sin necesidad de utilizar su fuerza bélica, con la complaciente actitud de nuestra Cancillería, cuyo titular manifestó que las piedras tienen sexo, convirtiéndose en un invitado de piedra en los foros internacionales. En lugar de ser un país creíble y de respeto, se nos considera una nación que espanta la inversión y sin perspectiva de desarrollo. Claro ejemplo de ello es que nuestra principal riqueza hidrocarburífera se encuentra estancada, gracias a los adláteres improvisados en la materia. Esta principal fuente de ingresos, repetimos, se encuentra en manos de ineptos y no de profesionales con alta formación técnica.
No se puede dejar de mencionar que un Ministro, con el estilo del fascista Mussolini, ha hecho una amenaza cavernaria, dando origen con ello a la formación de la gran troica americana fascista conjuntamente a Sánchez Berzaín y el peruano Montesinos.
El pueblo boliviano está hastiado de referendums que han costado a los bolivianos más de 100 millones de dólares, cercos socio-raciales, actitudes antidemocráticas y temerarias que tienen como fuente la imposición de Hugo Chávez que atenido a su circunstancial poder económico, pretende hasta invadirnos, contrariando el mensaje de unidad del Libertador Simón Bolívar, que nos liberó del poder colonial. Hoy parece que este Gobierno en vez de seguir el lineamiento libertario, está permitiendo que nos sometamos a este nuevo colonizador.
Los bolivianos le pedimos, sin temor a ser encarcelados sin proceso y sin ley, que pare esta actitud facistoide y entreguista, emulando a las dictaduras que exigían a los bolivianos que no estamos de acuerdo con esta política, andar con el testamento bajo el brazo.
Le pedimos al Presidente que escuche nuevamente aquella cueca del maestro Nilo Soruco concebida en el exilio: “Nunca un mal duró cien años ni hubo cuerpo que lo resista...”, que concuerda con la sentencia del gran Tamayo, de que “NO SE ES IMPUNEMENTE PODEROSO”. Concluimos que el terrorismo de estado está virtualmente dirigido a la desaparición de la oposición y un estado de terror vive la mayoría de los bolivianos, pensando que se nos privará de nuestra libertad de pensamiento, patrimonio y fe religiosa. Juzgue el pueblo