Gobierno pretende preservar su poder acallando a la Iglesia

Gobierno pretende preservar su poder acallando a la Iglesia

• Falta de políticas de administración del Estado hace que el Ejecutivo recurra al conflicto, afirma la diputada Sandra Yáñez Eid.
Dos analistas ratifican que el autoritarismo gubernamental del Movimiento Al Socialismo (MAS) y su doctrina política buscan callar a la Iglesia Católica para preservar su poder y cuestionar las críticas de los líderes religiosos, como el Cardenal Julio Terrazas, que advirtió sobre el dominio y peligros del narcotráfico en el país.

A esto se suma la última posición del oficialismo, que exige que la Iglesia pague impuestos por las actividades que realiza en el país, pese a que son obras de carácter social.

Los analistas Carlos Hugo Laruta y Jorge Lazarte en una entrevista con la ANF, convienen en señalar que desde el inicio de la administración del presidente Evo Morales, siempre han existido sentimientos de desconfianza para con la Iglesia y la jerarquía eclesiástica.

Laruta sostiene que la Iglesia no asume políticas partidarias, sino políticas globales que reivindican la convivencia social y política en todo el planeta.

Lazarte afirmó que el Gobierno observa a la Iglesia como un adversario político y que ello trata de desprestigiarla frente a su propia base religiosa, descalificando a la jerarquía eclesiástica y buscando acallarla. “El Gobierno se ha abierto distintos frentes contra todos los que consideran un riesgo para sus pretensiones de poder total”, aseguró.

Dijo que el MAS no tiene una visión de una sociedad pluralista del poder, porque toda crítica le resulta poco tolerable y las autoridades buscan que piensen del mismo modo sin que sea posible criticar. Dijo que si esto ocurre, el Gobierno y el MAS los consideran sus enemigos.

Laruta va más allá y considera que estas actitudes de las autoridades nacionales y el oficialismo entrañan el riesgo de que el país viva un proceso de autoritarismo y el totalitarismo.

“La Iglesia no es sólo doctrina cristiana, en el sentido de fe, que todos sabemos eso. Además hay una doctrina social, política y económica que tienen, por eso, me sorprende que algunos ministros hayan preguntando cosas que saben perfectamente”, manifestó.

Considera que es “imposible una reconciliación, entre el Gobierno del MAS y la Iglesia o la jerarquía católica”. A su juicio existe una “bifurcación” -término utilizado inicialmente por el vicepresidente Álvaro García Linera- que crearon dos líneas de evolución del proceso político: una de occidente y otra oriente-sur.

“Los grupos que componen el MAS, el partido comunista, la indigenista radical de García Linera, el alma del MAS tiene una estrategia claramente diseñada y en esto no van a retroceder”, aseveró.
Remarcó que la gente del MAS “tiene una fuerte tendencia por su origen ideológico, organizativo, político, doctrinal interna muy fuerte a tomar todo el poder y para eso utiliza todos los recursos que deba, la ley, la propaganda, la fuerza. Utiliza todo”.

El diputado oficialista, Jorge Silva, afirmó hace algunos días que la posición de la Iglesia es soberbia y obedece a un accionar político. Dijo que la jerarquía católica debe limitarse a su rol y orar por el Presidente, por el Gobierno y dejar de generar confrontación y violencia en el país.

La Iglesia le respondió al respecto que su misión es pacificadora y que no pretenden incursionar en una “política partidaria”, sino seguir la tarea emprendida por Jesús.

“Denunciar cuando hay atropellos contra los más débiles. Hoy se habla mucho de los pobres, pero hay mucha gente que está perseguida, que está exiliada, estamos viendo encarcelamientos injustos y la Iglesia tiene que defenderlos”, agregó.